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¡Poesias Genalguacil!

Zambombas Genalguacil Por las calles de Genalguacil, hace años atrás, las zambombas sonaban y alegría se iba a despertar. Comparsas de villancicos, cantando con fervor, pidiendo el arginaldo, en noche de esplendor. Las luces parpadeantes iluminaban el lugar, mientras los niños jugaban, sin parar de saltar. Las calles se llenaban de música y de algarabía, mientras la gente se unía, en una sola melodía. Las zambombas sonaban, anunciando la Navidad, las voces entonaban villancicos con fraternidad. Los corazones se abrían al espíritu de amor, mientras se compartía el pan y el calor. Las comparsas de alegría recorrían sin cesar, cada rincón del pueblo, y cada plaza del lugar. Las risas y los abrazos llenaban el ambiente, mientras el arginaldo se entregaba fielmente. Genalguacil se vestía de colores y tradición, mientras los villancicos llenaban cada rincón. El espíritu navideño se hacía presente, en cada zambomba y en cada comparsa valiente. Oh, qué bellos recuerdos de aquellos tiempos pasados, donde la alegría y el amor eran regalos deseados. Las zambombas y las comparsas, con su magia singular, hacen de Genalguacil un lugar mágico para recordar. Que las notas de las zambombas sigan resonando, y las comparsas por las calles vayan caminando. Que la tradición y el espíritu navideño se mantengan, en Genalguacil, y que la magia nunca se detenga.